Ventando sexo: prostitución y burdeles en la Nueva York del siglo XIX
Durante el siglo XIX, Nueva York se convirtió en una de las ciudades más prósperas y concurridas del mundo occidental. A medida que la ciudad crecía, también lo hacía su vida nocturna y, en particular, su mundo clandestino de la prostitución y los burdeles. Los burdeles estaban organizados de manera jerárquica, desde los más modestos hasta los de lujo y estilo Palacio, que atendían a una clientela adinerada. Entre los más famosos de estos últimos estaba el Hotel de Wood, situado en el corazón de la ciudad en la calle 25 oeste Brothels for Gentlemen: Nineteenth-Century American Brothel Guides .... Aunque la prostitución era ilegal, la policía generalmente miraba hacia otro lado debido a la corrupción política y policial generalizada, y la demanda incesante de servicios sexuales. El negocio de la prostitución y los burdeles se convirtió en una industria multimillonaria, afectando no solo a las mujeres involucradas, sino también a la estructura social y la salud pública en general. Las enfermedades de transmisión sexual, como la sífilis y la gonorrea, se extendieron rápidamente, y el gobierno tuvo dificultades para controlar la situación. El descaro y la opulencia de los burdeles de lujo llevó a la formación de grupos crecientes de reformadores y activistas, quienes abogaron por una legislación más estricta y el cierre de estos establecimientos. A finales del siglo XIX, su activismo comenzó a dar sus frutos, y la ciudad comenzó a ver el cierre de algunos de los burdeles más notorios, incluido el Hotel de Wood, y el declive de la industria de la prostitución..